El evento de este año tuvo el mismo formato que, en todo el mundo, requirió que se garantice la distancia social en todo momento para prevenir contagios durante las rutas. Pero que al mismo tiempo conectó a los motociclistas de toda la ciudad por una buena causa.
El domingo 29 de septiembre del 2013, igual que otras 144 ciudades, Quito se unió a la rodada temática más importante del mundo, el Distinguished Gentleman's Ride (DGR). Fueron entre 70 y 80 motociclistas que salieron a las calles de la capital ecuatoriana para sumarse a una iniciativa global de recaudar fondos y concienciar sobre temáticas de la salud de los hombres, principalmente cáncer de próstata y suicidio masculino.
El grupo de motociclistas, en el que había miembros del club El Avispero, propietarios de Ducati y Royal Enfield, principalmente, se reunió en la Av. de los Shyris y rodaron por el centro norte de la ciudad. Hicieron una parada en la Plaza de San Francisco, donde llamaron la atención de la gente que caminaba por el sector; y, finalmente subieron hasta El Panecillo para registrar, en imágenes, su inclusión oficial en esta iniciativa, originada el 2010 en Sidney, Australia, por Mark Hawwa.
Así nació el DGR en Quito. “Cada año hemos visto más interés en la comunidad local de motociclistas. El evento ha crecido de una manera exponencial”, señala Pablo Proaño quien, por iniciativa propia, se acercó a la organización mundial del “gentleman” para obtener la “licencia” oficial de este evento.
Sin embargo, el año pasado la pandemia mundial del Covid-19 interfirió radicalmente en el desarrollo del Distinguished Gentleman's Ride. No impidió su realización, pero sí motivó una serie de cambios importantes en cuanto a la estructura habitual del paseo ya que el objetivo cambió a “rodar en solitario” o en pequeños grupos de motociclistas para colaborar con el tema del distanciamiento social.
Después de haberse celebrado en el 2020 una versión diferente debido a la pandemia, este 2021 el Distinghished Gentleman's Ride se realizó de nuevo en versión distanciada socialmente y cumpliendo con todas las medidas sanitarias pero sin perder su esencia. Además cambió la tradicional fecha de septiembre por el domingo 23 de mayo.
Los organizadores, con Proaño a la cabeza, y con el respaldo de Juan Carlos Castillo y Diego Betancourt, realizaron una rodada “no oficial” con un grupo de aproximadamente 20 motos. Y conminaron a la comunidad motociclística para que hiciera lo mismo. “Aunque hubo grupos que no respetaron este pedido de la organización mundial del DGR, este año mantuvimos mucha cautela con el tema de contagios”, señaló Proaño.
Pero también anotó un punto importante en la razón de ser del DGR a nivel mundial. “No queremos que los motociclistas solo salgan a rodar por moda y se olviden de inscribirse en la página oficial y donar si es posible”, enfatizó. Es que este es justamente el objetivo principal del evento a nivel global. “El Gentleman no se trata solo de vestirse elegantes y salir sin siquiera saber cuál es su naturaleza”.
La concentración motera seguirá organizándose en todo el mundo, incluido el Ecuador, para que hombres y mujeres ataviados de época y montados sobre sus motos, clásicas preferiblemente, muestren de una manera divertida su apoyo a los problemas de salud masculina.
El pasado 23 de mayo, las calles de Quito vieron nuevamente cómo diversos grupos de motociclistas, algunos con cantidades muy numerosas de participantes, contradiciendo el pedido oficial, rodaban elegantemente ataviados. El centro norte de la ciudad, su centro histórico; y, en algunos casos, los valles aledaños a la capital, acogieron a quienes no dejaron que el Covid-19 les alejara de sus motos y de esta iniciativa.
“Esperamos que esta sea la última ocasión en que el DGR se realice de esta forma. Ojalá la pandemia cese pronto para que en el 2022 podamos nuevamente reunirnos todos en un solo grupo y ser, otra vez, centenares de caballeros y también damas, los que salgamos a las calles de Quito, luego de aportar económicamente a tan importante objetivo, para demostrar que el Gentleman es mucho más que una rodada de moda”, finalizó Pablo Proaño.
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